lunes, 4 de febrero de 2008

Las velas... las copas...




La cerveza entre velas resulta más interesante... hasta sabe más rica...

una salida divertida entre amigos es interpretada como algo más por los otros... sólo porque en el centro de la mesa hay una vela... porque hay un pianista y un mesero de traje blanco...

los otros nos miran pensando que guardamos un secreto... un amor secreto quizás... el único secreto que guardamos es que en aquel ambiente "VIP" contamos con tres rojos en total... yo uno y él dos... un total de tres birras y algo quedó de vuelto...

El otro secreto es que nos tenemos la confianza para salir a tal ambiente a hablar paja, sin darnos cuenta de que el lugar está pensado para las parejillas y que nosotros somos dos... por lo que se concluye que ellos son algo...

el secreto es que no hay secreto... como dijo mi hermano "por morbosos morirán engañados"

Confieso que guardábamos un secreto, el secreto de la asexualidad que producen las amistades de tantos años y confidencias... la inocencia de la amistad fraterna...

Pero claro, yo soy mujer y estoy guapa, me dijeron x ahí... y él es hombre con fama de galán... y en esta sociedad, especialmente en Turrialbita una amistad así, entre uno y una es inconcebible...

jejeje!, nosotros nos reímos y nos tomamos la birra entre frases que incluyen "mae, acá entre nos..." "mae, cuidado cuenta lo que le dije ahora..." me extraña, mae!!!"... "mae mae mae"

Es entonces que suenan las notas de una canción que menciona a la Luna... mi atención cae de inmediato en el pianista quien me sonríe y me calva sus ojos celestes fingiendo complicidad... que mal actor que es!... me limito a sonreir y le devuelvo a la mirada a mi compa, quien me recibe la sonrisa con una alegre y brillante conclusión: mae Laura, mejor nos vamos, verdad?

1 comentario:

Melissa Soro dijo...

que bueno loca!
hasta me transporté al piano-bar..jeje