lunes, 28 de diciembre de 2009

2009: La cosecha

El 2009 fue en gran medida un año de recoger cosecha. Ir juntando cartones, pero principalmente de ir recibiendo de aquellas personas a las que les di. Fue un año para la familia, para las y los amigos y para el trabajo. Un año para dar y para recibir.

Fue crecer, fue aprender...

Fue dulce y fue amargo, fue ganar y perder: ganar para ganar, perder para perder y perder para ganar... Fue año de esperas sin final feliz, pero principalmente fue año de reinvención.

La lucha siempre latiendo, la esperanza un poco más a flor de piel... quizás reviva algún día, con esa ingenuidad e inocencia previa al 2007...

Ahora que me siento un poquito más yo, más mía, y que me siento en capacidad de disfrutar las transiciones. Más consiente del amor por las pequeñas, medianas y grandes cosas, por las personas, por el entorno... simplemente más consiente del amor y de la energía que fluye, renueva, transforma...

Con los años me vuelvo más cursi, eso sin duda. Encuentro alegría en declarar amor a las personas cotidianas y las personas extraordinarias. Encuentro alegría en decir.

Este año de alguna manera misteriosa me ha permitido proyectarme más, mostrarme más, no sólo como profesional, si no también como mujer. Y es delicioso saberme cada vez más mujer, saberme en esta eterna transición de crecimiento y encontrarme en un punto en el que los encuentros y desencuentros que realmente me definen son aquellos que tengo conmigo misma.

Siento que puedo escribir un post kilométrico, el cual posiblemente no diga mucho. Francamente no pensé tener tantos cambios en las circunstancias de principio de año respecto a las del día de hoy. Han pasado tantas tantas cosas que me lleno de nostalgia.

Pero pienso en lo positivo y me siento satisfecha, creo francamente en los logros alcanzados, a pesar de que no se alcanzaron todos y de que algunos no fueron plenos. Creo en ellos por que se luchó con convicción y con entrega a cambio de nada más que la satisfacción de sentir que se hace lo correcto.

No pido nada para el 2010... bueno, un trabajo, eso sin duda alguna! Pero además de lo necesario, lo que pido es tener el corazón y la mente dispuesta, atenta y abierta para recibir lo bueno, lo que venga, lo que me haga crecer y ser mejor.

A partir de esta autoreflexión, me lleno de buenos deseos y buenas vibras para mí, para vos y para la humanidad.

Bienvenido 2010!

¿cuando fue que nació esta ilusión?

tan pronto que ya me estoy volviendo alergica...


... ring?



lunes, 14 de diciembre de 2009

sin comprender

como pasarle la demoledora al sentimiento, al corazón, a la memoria

y donde había una casita bonita montar un parque de diversiones...
y decirle hogar


y le dijiste amor

y le dijiste amor,

y aquello que para mí valía el cielo y los mares, las estrellas, todas las criaturas, las más bellas melodías, el más tierno silencio, los colores, los aromas...

aquello que hacía fiesta en mis sentidos y se deslizaba en mi rostro dibujando sonrisas...

aquella suavidad, aquella paz, aquella cercanía aún en la lejanía...

aquel nosotros tan construido y a la vez tan natural...

aquel nosotros tan nosotros...
todo aquello que me hizo merecedora de tu amor y te hizo merecedor del mío...



se volvió barato, se vació de sentido,

quedó tristemente prostituido
pasó a ser cualquiera
pasó a ser para cualquiera

te volviste uno de aquellos quienes dicen amor con tal levedad
que desdibujan el encanto de su contenido



martes, 8 de diciembre de 2009


arranquémonos la piel

a ver si nos dejamos de misterios