hay un baile frenético en mis caderas que se activa al ritmo del bongó
huele a lluvia, y mi piel no huele más a vos.
por eso te espero, porque no tengo ganas de lluvia a menos que vengas a beber las gotas de mi cuerpo, porque la lluvia viene con el olor de los besos ausentes y de las caricias están por ser dadas.
Las gotas caerán en los techos de forma percusiva, pero mi danza y yo te esperaremos, hasta que las tormentas del deseo nos inunden y hasta que en la danza me inunde de vos.
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3 comentarios:
que bueeeeeeeenooo que esta!!!!!
que ganas de un aguacero!!! pero compartido!!!! jejeje
saluditos!!!!!! = )
Que rico una tarde de lluvia debajo de las sábanas...y con compañía....
Extraño eso. Yo también quiero lluvia con esperanza.
ahhh que hermoso...eso de que la lluvia huele a besos ausentes y caricias esperadas es tan cierto...que rico...que con la esperanza vengan truenos y relámpagos y que la lluvia deliciosa te deje con esa misma sensación de la tierra mojada!
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